domingo, 14 de abril de 2013

Yo quiero morir joven...


Cuando era más chica el significado de ese deseo era un tanto distinto, tenía mucho de depresivo y mucho de sentencia, lo decía con la seguridad de los que piensan poner manos a la obra en dicha empresa, vamos que me sentía impulsada también por el peso de la inmadurez; con el paso del tiempo, se me fue pasando esa manía y de pronto, hasta me vi soñando vivir muchos, muchos años. Hoy empiezo a dudarlo de nueva cuenta y me quedo pensando en ello, dándole más vueltas al asunto que antes, pensando y repensando qué es lo que lo hace a uno querer seguir viviendo. ADVERTENCIA: esta entrada puede ser producto de mi estado depresivo actual, disculpe las molestias que esto le cause.



Muchas veces miramos la vida y resolvemos que es una mierda, lo cual es cierto, muchos de los aspectos de ella lo son, vivimos luchando contra la marea, vivimos viendo injusticias, desavenencias  inconsistencias, contrastes; en lo personal hoy me siento cansada... cansada de todo, enferma, aburrida, harta.


Amo la vida, amo lo que tengo he sido condenadamente feliz, ¿pero de qué sirve en momentos como este?, a veces uno mira a su alrededor y está tan destrozado... tan hecho trizas... ¿qué hay más allá?

Hoy mis ganas de morirme joven no tienen que ver precisamente con lo horrible que puede ser la vida, hoy tiene que ver con lo que depara el futuro; el paso de los años es horrible, ver el cuerpo mermarse, ver la fuerza irse, saber que un día mi mente simplemente no será la de hoy, decaerá, la memoria, la voluntad, la cordura, la coherencia... saber que hasta en lo que crees se desvanece, que hasta lo que amas se desmenusa.

Es triste, es deprimente... destroza.

Si me espera un futuro en el que no podré siquiera recordar a los que amo, en el que estaré siempre dudando hasta de lo que sé de memoria, sospechando de la experiencia, dudando de mi historia... vamos, que lo vuelvo a decir: yo quiero morir joven.

Porque acabar así, no sería distinto a vivir en el olvido.

2 comentarios:

  1. No se trata de morir joven o viejo, sino de si se ha vivido.. Pero buena reflexión.

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  2. Sí, eso es cierto... pero hay algunos factores que a veces invitan a desear morir a temprana edad o en temprano momento... casos como aquellos a los que se les diagnostican enfermedades crónico-degenerativas u otros... por ejemplificar algo :P... Gracias por leer y comentar!

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