viernes, 13 de noviembre de 2015

"I wanna be a pretty girl!" (American Horror Story S01E05)


Quería hacer esta entrada en las fechas cercanas a la que toca el capítulo, pero me ocupé y me enfoqué en otras muchas cosas, ninguna de ellas productiva, pero bueno, al fin estoy escribiéndola; primero que nada, cosas interesantes, volvemos a la noche de brujas y de primer momento tenemos a nuestro amigo el quemadito dando lata en casa de los Harmon, quienes han tenido que salir de carrera al hospital porque Vivian se siente mal... ya sabemos, ¡oh sorpresa en el hospital al ver el ultrasonido del bebé!... 

Mientras tanto, Violet, asustada por la intromisión de nuestro amigo tostado, tiene que salir de la casa "huyendo" para tener su primera cita fuera de la mansión con Tate... por cierto, un Tate más luminoso, más alegre y lindo en este capítulo, ¡qué ironía!; Violet y Tate están en la playa y casi tienen un encuentro más que romántico, al menos ella eso quería, pero Tate se encuentra nostálgico y se escuda en el medicamento que toma, aunque sabemos que no es eso lo que le impide "actuar". El momento dorado del capítulo viene justo ahí, en la playa, cuando un grupo de muchachos con "excelentes" disfraces, se topan con la pareja y les arruina el momento, presionando a Tate y haciéndolo escapar, porque parecen muy interesados en sacarle información. Pero él no sabe qué tipo de información.

Confieso que me gusta mucho esta parte, porque viene una de las historias más complicadas de la serie, sobre todo más tabú, un tema que al menos en Norteamérica es cosa de mucho tacto y la serie sabe tocarlo de forma interesante y perturbadora; Tate se nos revela como un joven trastornado que asesinó a sus compañeros de escuela en un tiroteo, y estas víctimas mortales empiezan a seguirlo durante buena parte del capítulo, intentando averiguar porqué les asesinó, qué lo llevó a matarlos, a cortar sus vidas cuando tenían tanto por delante.



Por otro lado, vemos a Hayden haciéndole la vida de cuadritos a la pobre de Vivian, quien tiene que soportar el estársela encontrando por todas partes, aunque lo curioso es que Vivian no sabe que la chica está muerta, lo que le da más sabor al asunto; Ben por supuesto que sabe que su ex amante está muerta, o al menos eso piensa al principio, aunque luego, como buen médico, se siente más inclinado por pensar que está siendo engañado y que buscan chantajearle para sacarle dinero. Mientras esto está pasando, nuestra vecina favorita tiene que lidiar con su hija muerta, así como con la posibilidad de que el otro de sus hijos que no es precisamente muy estable se entere, así pronto estamos frente a una Hayden que se está pudriendo por dentro producto de los golpes que recibió antes de morir, una casa que se incendia de la nada a raíz de los seres sobrenaturales que se pasean por ella, manos que manan de bajo la cama y hornos de microondas que estallan.

Este capítulo me gusta porque podemos ver a todos los muertos de la casa paseándose hacia el final, volviendo a su maldición, pero también nos enteramos de verdades que habían venido mostrándose a medias y que al fin podemos ver completas; al mismo tiempo hay maquillajes muy buenos y situaciones que te dejan muy desencajado. La plática de Lange con la joven Harmon en que le revela cosas de sus hijos, de la casa y de sí misma, la charla final entre Tate y sus víctimas, cuando le exigen saber porqué y él simplemente no sabe de qué están hablando; el momento clímax cuando Vivian tiene que sacarle las verdades a Ben y el pobre tiene que confesarle toda la verdad, parte por parte y aderezado con la joven muerta como ambientación.

Podría decir mucho más sobre el capítulo, contárselos al completo, pero lo mejor es que lo vean, tiene un encanto sobrenatural que logra atrapar y dejar con ganas de ver el resto de la serie; si debo decir cómo va el nivel de atención en este momento, diré que la serie me sigue gustando montones, los capítulos envuelven y convencen, los personajes son humanos, redondos y aunque muertos, seducen y dan vida a la trama.

Cuando nos encontramos frente a los Harmon primero pero luego frente a todos estos personajes fallecidos, nos damos cuenta que hay mucha tela de donde cortar, que cada uno tiene una extensa historia detrás que ha logrado seducirnos y conquistarnos; eso es lo que realmente atrapa de la serie, que son muchas historias y que logran ser funcionales, dan consistencia a lo que pasa en la casa y aunque los sustos caen por momentos a segundo término, se mantiene el suspenso y saborcito a película de terror.

En conclusión: sigan viéndola conmigo, hay secretos todavía por descubrir y seguramente, muchos otros personajes por conocer.




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