Dieciocho años perdidos (Making a Murderer S01/E01 y E02)

"Sabíamos que era inocente, lo sabíamos."

La idea de justicia es en serio tan... tan voluble, tan de cada persona, que cuando uno escucha que una persona está en prisión siendo inocente, no nos extrañamos, quizá sí un poco más si ocurre en un país como en Estados Unidos, donde televisión, cine, medios, nos han vendido la idea de que el sistema de justicia es infalible, que el ADN, que la investigación forense y criminal no comete errores... y luego está Steven Avery; estamos hablando del primer capítulo de Making a Murderer de Netflix, la serie que abarca el caso Avery, que estos días nos va a atañer... son diez capítulos, todos ya en línea en el servicio antes mencionado.

De tipo Documental, Making a murderer narra un hecho si no inquietante y escandaloso, por lo menos preocupante y hace que podamos darnos una idea de lo que puede ser una injusticia... o no; para esta ocasión, las entradas estarán divididas por dos capítulos cada una y trataré de ir medianamente rápido, así que comencemos por algunos datos técnicos como siempre, ya saben, les comento acá lo que veo para que lo vean también, se los recomiendo y sé que lo van a disfrutar.

Estrenada en 2015, la serie documental de la que hablamos dio a conocer un evento casi vergonzoso de la justicia, que empapa de suciedad la reputación del Condado de Manitowoc en el estado de Wisconsin; escrito y dirigido, además de producido por Laura Ricciardi y Moira Demos, reúne todo lo concerniente al primer caso contra Steven Avery por violación, por el que fue encarcelado 18 años, hasta que el ADN lo exonera (aun cuando incluso sin él, podría haber sido puesto en libertad), y luego incluye todo lo que aconteció por el segundo caso del que se le acusa, el homicidio de Teresa Holbach, una fotógrafa que desapareció siendo él el último en verla. Hay que decirlo, esta serie es una bomba, es todavía mejor y más profunda y bien hecha que The Keepers, donde es claro hacia el final de los capítulos un cierto sesgo de la información y hasta me atrevería a decirlo, una inclinación a desviarnos del verdadero causante de los crímenes; ok, quizá decir que está mejor hecha es demasiado, pero compite bastante bien. En el primer episodio nos enteramos de la injusticia que sufrió Steven en su juventud, con sólo 22 años, es sentenciado por abuso sexual; creo que es básico que digamos una cosa muy importante: 

Steven no es un hombre absoluta y completamente bueno, no, hablamos de un vándalo de poca monta en su juventud, que robó, torturó animales, gustaba de meterse en problemas incluso con su familia, osea, tampoco es un dulce corderito; el problema es que sí fue acusado de algo que no cometió, quizá por su juventud problemática es que fue la víctima perfecta, creo que debía ser el típico adolescente molesto que fastidia a todo mundo, vieron la oportunidad de meterlo al bote y lo hicieron, muy probablemente el verdadero motivo de su encarcelamiento fallido fuera que lo asumieron culpable porque parecía estar en escalada y en lugar de querer buscar a alguien más, prefirieron ahorrarse el trámite y meterlo a la cárcel a él.

Sí, incluso con ello dejando libre aun verdadero violador y sí, encerrando con ello a un hombre "parcialmente" inocente; a pesar de presentar mil testigos, de demostrar hasta con recibos de pago que él no había sido, que al mismo tiempo que se cometía el crimen él estaba en otro lado, el chico es acusado y sentenciado. Así y tras muchos abogados después y apelaciones y apelaciones (algunas insultantes en su contenido seguro y fidedigno), así como pruebas de ADN, hace que el joven Avery, acusado en inocencia salga de la cárcel... en una demostración de inocencia que tardó nada más 18 años, la mitad de su vida nada más.

Y bueno, si hay algo que reconocerla a Avery es su valentía para no admitir las cosas que no había hecho y soportar y soportar... y además su valentía para aceptar demandar, sí, demandar a quienes le encarcelaron buscando con ello poner un antecedente para que una acción terrible como de la que fue víctima se repitiera... pero no siempre sales bien librado cuando pides justicia... incluso si eres inocente, mucho menos cuando acusas a las autoridades y pretendes con ello ganarte 36 millones de dólares; pero aún cuando intentes todo eso, aún cuando estés atreviéndote a demandar a un grupo de policías del sitio donde vives y peor aún, que te tienen vigilado... no te imaginas que te van a hacer lo que a Steven le hacen.

En el capítulo dos nos enteramos de lo ocurrido en 2005, en octubre, escuchamos el audio de Teresa Halbach, una joven que toma fotografías para una revista en la que Steven esperaba poder vender su camioneta, la chica va a su casa, toma las fotos, charla apenas un par de cosas simples con él y se va, para nunca volver a ser vista por nadie; la fotógrafa desaparece justo cuando Avery está en pleno proceso de demanda para recuperar una pequeña compensación (pequeña de 36 millones, lo sé, lo sé XD) por el proceso erróneo en su contra, y para colmo desaparece en las cercanías de su casa, así que ya de entrada andamos mal. Al inicio del capítulo anterior podemos escuchar quizá la evidencia más clara de que algo anda mal con la policía, el audio de una llamada por radio donde los oficiales dejan en claro que sin cuerpo, sin evidencia, sin nada, el único sospechoso posible y el culpable por adelantado, debe ser Steven Avery.

Avery, que se ha convertido en una figura pública debido a la injusticia que vivió, un sujeto con poder mediático que iba a ganar una demanda contra el sistema judicial del condado en que vive... todo denota que no, no podían permitirle salir indemne del asunto, no podían dejar que todos supieran que tenía razón y había sido inculpado; parece que al fin Avery está teniendo una buena vida, de nuevo con sus padres, su novia, sus hijos, sus hermanos, está ahí luego de la mitad de su vida y quiere recuperar el tiempo perdido, quiere vivir de nuevo y amar y seguir adelante... pero claro, la vida no es como uno la quiere.

Cuando pensamos que el producto de la demanda no lo va a pagar el gobierno, si no los mismos funcionarios, de su bolsillo, de sus pensiones, es cuando empezamos a entender un poco el porqué un montón de funcionarios se alteran tanto y sí, se pueden prestar a cometer un crimen si es que eso los exonera y con ello se hunde a un "supuesto culpable"; el orden de los eventos, puesto en una línea temporal bastante gráfica, nos demuestra en el capítulo dos de esta serie que la desaparición de Teresa Halbach es demasiado cercana a los eventos que se están sucediendo en Manitowoc para no estar relacionada con la salida de las autoridades a la demanda interpuesta por Avery. Definitivamente, si el río suena, es que agua lleva y una de dos, o Avery es un criminal profundamente inteligente, elevado para cualquier investigador y para el mismo sentido común, por momentos incluso para la evidencia, o bien, algo muy malo está pasando aquí; sobre todo porque en serio, cualquiera vería en este caso moros con tranchetes.

Mientras la policía ya tiene la mira sobre Avery, trayendo incluso a un fiscal externo para evitar que se diga que tiene una opinión sesgada, periodistas y documentalistas saben bien que la cosa es para explotarse y graban y graban todo lo que ocurre, dando como producto esta obra grandiosa dentro de Netflix... y la cosa se va poniendo cada vez mejor y mejor. Han encontrado el vehículo de Teresa en la propiedad de los Avery, pero sabemos que eso cualquier persona podría haberlo provocado, simplemente porque los Avery tienen un tiradero de chatarra, reúnen un montón de autos para desarmar y simplemente el tamaño de las instalaciones impiden que ellos mismos podrían vigilar su propiedad a toda hora, así que no es raro pensar siquiera en que pudieran haber ocultado el auto ahí para incrimiarlo.

Pero la cosa se pone peor cuando se dice que han encontrado pruebas, que se encontraron dentro de las tierras de Steven y que eso significa que sólo puede haber un sospechoso y sí, es nuestro supuesto culpable, luego confirmado inocente y ahora de nueva cuenta, supuesto culpable; encontrar restos de Teresa es el parteaguas para comenzar con esta historia de horror, fragmentos de hueso y dientes en una hoguera y la llave del auto de la chica en la habitación de Steven... todo lo señala, todo lo inculpa, ¿usted qué cree?

Debo decirlo, la serie es grandiosa, estos primeros dos capítulos lo tienen a uno contra las cuerdas, emocionado y con el alma en un hilo, de pronto tenemos a un sujeto inocente que es acusado de homicidio, tenemos a un hombre que buscaba demandar a la policía que le falló y antes de ganar, porque iba a ganar, le acusan de asesinar a una chica, que además está desaparecida y de la que sólo las autoridades especulan el final de su vida; Steven en cada vídeo dice "yo no fui", se mantiene firme en ello y jamás da un paso atrás, por más presión que le hagan, por más acoso que sufra se mantiene firme en la verdad, en que él no mató a Teresa... pero ellos insisten en que sí.

Al capítulo uno vamos a darle, sobre todo por su final un magnífico 9.8... y al segundo un nada malo 9.8 también... la trama se va poniendo tensa, la historia es cada vez más terrible y tétrica, la autoridad contra un sujeto simple y cotidiano, la autoridad contra alguien a quien ya habían destruido...

Y sí lo hicieron una vez, ¿por qué no de nuevo?

Nos vemos en el siguiente capítulo.